¿Qué es la receta electrónica y cómo funciona?

Conocer la receta electrónica es uno de los aspectos más básicos para los Técnicos en Farmacia y Parafarmacia. Es probable que acabes trabajando en una farmacia, por tanto tendrás que atender a muchos clientes que la usan.

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Antes de la implantación de la receta electrónica, la compra de medicamentos era bastante tediosa para los enfermos crónicos. Estas personas pasan años tomando los mismos medicamentos y hasta hace unos años tenían que ir al médico frecuentemente con el único fin de conseguir recetas.

Ahora, gracias a la implantación de la receta electrónica, esas prescripciones tienen que renovarse solo una vez al año en la mayoría de los casos. Pero antes de nada, vamos a ver qué es la receta electrónica y cómo funciona.

¿Qué es la receta electrónica?

Para que tengas una definición rigurosa de la receta electrónica, te dejamos la expuesta en la página web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad:

La receta médica es el documento normalizado por el cual los profesionales legalmente facultados prescriben los medicamentos o productos sanitarios al paciente para su dispensación.

La receta médica electrónica es una modalidad de servicio digital de apoyo a la asistencia sanitaria que permite al facultativo emitir y transmitir prescripciones por medios electrónicos, basados en las tecnologías de la información y comunicaciones, que posteriormente pueden ser objeto de dispensación.

Como ves, la explicación de las instituciones oficiales es la más acertada pero a su vez el lenguaje utilizado está bastante lejos de los usuarios reales de la receta, así que lo vamos a explicar de forma más sencilla.

¿Cómo funciona la receta electrónica?

¿Te gustan las historias? Si es así, ahora mismo vas a leer una. Se trata de la historia de una persona, que puedes ser tú, que empieza a utilizar la receta electrónica.

Imagina que necesitas tomar uno o más medicamentos de forma continua. Vas a tu médico de cabecera a pedirle el montón de papeles, como de costumbre. Sabiendo además que al poco tiempo vas a tener que hacer lo mismo.

Has pedido cita para una hora pero entras media hora más tarde, normal en los médicos. Cuando pides las recetas de siempre, tu médico te dice que ahora se está haciendo de otra manera y te va a hacer una receta electrónica.

El doctor empieza a teclear tus medicamentos en su ordenador y te dice que eso que está escribiendo en su programa informático va conectado con las farmacias de la Comunidad Autónoma.

Ahora ya no necesitas ningún papel para recoger tus medicinas habituales. Solo con ir a la farmacia y presentar tu tarjeta sanitaria, ya te las dan. De todas formas, tu médico saca un papel con la lista de los medicamentos de tu tratamiento crónico y nunca está de más llevarla a, aunque ahora no es imprescindible.

Además hay un dato importante, que es la fecha de caducidad de la receta electrónica, que suele ser al cabo de un año. Cuando se acerque la fecha, tendrás que volver al médico de familia para que te la renueve y valore la necesidad de que sigas tomando esas medicinas.

Una vez sales de la consulta del médico tienes 10 días para activar tu receta electrónica, o lo que es lo mismo, tienes que acudir a la farmacia en 10 días como máximo para retirar las primeras medicinas. Si no lo haces, tendrás que volver al médico para que te la vuelva a activar.

Con el sistema tradicional de recetas, el médico de familia podía escribirte varias recetas y tú podías comprar varias cajas de medicación.

Ahora solo podrás retirar una caja y tendrás que ir a recoger la siguiente cuando estés terminando la primera. De todas formas, esto en la farmacia lo ven y te lo indican. Si tu caja tiene 30 pastillas y tú vas a comprar otra cuando hayas gastado 15, en la farmacia te dirán que todavía no puedes recogerla.

En la receta electrónica aparecen todos los tratamientos crónicos que tengas, independientemente de si los tomas todos los días o no. Un ejemplo de esto son las medicinas para las alergias, que suelen ser problemas estacionales.

Si te han prescrito algún medicamento para paliar los efectos de una alergia que padezcas y este es crónico, aparecerá en tu receta electrónica. Pero no será necesario que vayas a recogerlo en un momento en que no sientas molestias por la alergia.

¿En qué casos no puedes utilizar la receta electrónica?

La receta electrónica solo es válida para los medicamentos recetados por facultativos de la sanidad pública española. No sirve cuando acudes a un médico de una consulta privada. Tampoco pueden ser usar la receta electrónica los clientes de las mutualidades.

Qué verás en las farmacias sobre la receta electrónica

Cuando un paciente vaya a buscar sus medicinas y te entregue su tarjeta sanitaria, accederás a sus datos, a las prescripciones médicas y a otras instrucciones sobre el tratamiento. Como antes mencionamos, también podrás ver si el usuario puede retirar o no sus medicamentos. Esto lo calcula automáticamente el programa según la posología establecida.

Si quieres conocer cómo es físicamente un papel de receta electrónica, te recomendamos este vídeo correspondiente a la Comunidad Autónoma de Canarias. También te servirá si tu Comunidad Autónoma es otra, ya que todas son similares.

Ventajas e inconvenientes de la receta electrónica

Un problema de la receta electrónica es que solo era válida para la Comunidad Autónoma habitual de residencia. Esto era un problema para las personas que se desplazan, por eso está en vías de solución mediante el proyecto de interoperabilidad de la receta electrónica, que comenzó hacia 2015 y poco a poco se va implantando.

Sin duda esto ha sido uno de los grandes avances del sistema sanitario. Ha servido para descongestionar las consultas médicas, evitar viajes al centro de salud y tiempo de espera para los usuarios.

A cambio, los pacientes tienen que hacer más viajes a la farmacia, pero es más probable tener una farmacia cerca de casa que tu centro de salud y además no hay que esperar.

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